lunes, 25 de enero de 2010

EL PIRMER RESPONSABLE DE LA SEGURIDAD EN LA CIUDAD ES EL ALCALDE, Y SU PRIMERA TAREA, UNA POLITICA DE SEGURIDAD CIUDADANA.


Por: RAFAEL CASTILLO PACHECO
Con la casi inimputabilidad mediática y de opinión ciudadana, no es muy presentable, plantearle críticas al primer ciudadano del Distrito, en esta hora cuando goza de una ascendente popularidad que podría rebasar el 100%, y en este minuto, capturado como está, por el síndrome de Uribe, exuberantemente irascible y patético.

El Alcalde ha cumplido en el intermedio de su periodo, con ejecutorias importantes en el campo de la educación haciendo inversiones sin precedentes; en la salud con la apertura de los PASO; el mejoramiento de la malla vial en sectores populares; y también, en el campo financiero con un buen manejo de la deuda pública y la retoma de importantes ingresos para el Distrito, diseminados en la maraña de las concesiones. Al lado de esto, las aberturas prosperan solícitamente en el contorno del desarrollo institucional y de la seguridad ciudadana. Se embelleció justificadamente la planta física de la Alcaldía, pero no se han modernizado sus procesos; la toma de decisiones está concentrada en el Alcalde y en alfiles de su confianza; escasean los planes o políticas públicas y los que existen no se cruzan de forma transversal por otras secretarias y dependencias. Falta esa visión integradora, que una prospectivamente cada pedazo de la administración, poniéndola por ejemplo, al servicio del tema de la seguridad, su gran talón de Aquiles.

Cuesta poco trabajo entender las altisonantes declaraciones de Alejandro Char, en los recientes cuestionamientos que le hiciera a la Policía Nacional. Son unos desahogos írritos, hecho con frases muy básicas y de una persona emotiva guiada por sus pálpitos. No podría hacerlo de otro modo, explícitamente porque a la Policía ni a la ciudadanía le ha dicho cual es su estrategia de seguridad ciudadana. Podría decirlo mejor, porque tiene los pilares cardinales de la misma, en un documento celosamente custodiado en su despacho, elaborado por CORPOVISONARIOS pagado por su administración, la Gobernación Del Atlántico y la Cámara de comercio, llamado PLAN INTEGRAL DE CONVIVENCIA Y SEGURIDAD CIUDADANA PARA BARRANQUILLA Y SU ÁREA METROPOLITANA.

Un tema de fondo, antesala de la Política de Seguridad Ciudadana, que se necesita esclarecer, es que los Barranquillero tengan claro, a quien le corresponde el tema de la seguridad en la ciudad. Y hay que decirlos sin vacilaciones ningunas: EL ALCALDE. El Doctor Char debe aprehenderse del tema. Así lo enseña la Constitución en el artículo 315: “… El alcalde es la primera autoridad de policía del municipio. La Policía Nacional cumplirá con prontitud y diligencia las órdenes que le imparta el alcalde por conducto del respectivo comandante”. Lo ratificó después la Corte Constitucional en la sentencia C-492/02: “En síntesis, tanto la función de policía como la actividad de policía son monopolio del órgano unipersonal y primera autoridad política de las respectivas entidades territoriales, existiendo al efecto una unidad de mando en cabeza del Presidente de la República…”.

En dos años de gobierno, el Alcalde apenas ha completado una visión sumaria de la seguridad, resultado de su tenue acercamiento al tema, sus intermitentes asistencia a los Consejos de Seguridad, a los que envìa preferiblemente a un subalterno, y al poco trabajo en equipo que realiza por ejemplo con instancias como el poder judicial, en donde lo sienten lejano y su contradictor, según dicen mis fuentes. Por eso, hasta hace poco, para explicar el problema repetía las justificaciones del Comandante de la Policía sobre los homicidios, por eso ingenuamente sin maledicencia se separó del Plan Desarme del Gobernador Verano, y por eso voló como un corcho de champaña, cuando el General Gamboa dijo que “la pelea está casada entre ellos, pero no es contra la ciudad. Estos crímenes inquietan, pero no nos tienen por qué afectar a todos”. A mí también, me saco la piedra el General.

Ahora, fiel a la estéril tradición terapéutica del problema en la ciudad y el departamento, se convoca a un Consejo de Seguridad, para pedirle al Presidente que resuelva lo que no ha logrado la Política de Seguridad Democrática en las ciudades capitales, madrigueras hoy, de los desplazados actores de violencia combatidos en el campo. El Doctor Uribe responderá positivamente, para dejar gozosos a ciertos dirigente políticos y gremiales, que han pedido nuevas unidades de policía, a lo que dirá que si con la asentida dosis de regaño. William Bretton, el célebre mano dura ex jefe de la policía de Nueva York decía hace poco:” la policía juega un papel disuasivo, pero la sola presencia no garantiza que se erradiquen los delitos”.

El Alcalde tiene que saber cómo evoluciona el delito en las diferentes comunas de la ciudad asignando unos oficiales de alta graduación responsables para ello. Semanalmente, como lo hacía Antanas Mockus en Bogotá. Debe conformar y reunir a los equipos necesario con participación del Poder Judicial y académicos, para conocer explicaciones y marcar pautas sobre el aumento o disminución de los crímenes, y como se están orientado judicialmente las conductas delictivas, con la inclusión de acciones de tipo social respectiva.
Termino con una cita del documento de CORPOVISIONARIOS, con la que tengo total identificación: “Las acciones policiales y de la justicia contra el crimen organizado o el mejoramiento de la eficacia de la autoridad para reaccionar frente a comportamientos delictivos y sancionar a quienes han cometido delitos consiguen caídas en las tasas de criminalidad, pero solo acciones que impactan de manera efectiva en los factores asociados a los fenómenos de violencia modifican las circunstancias que han permitido que esos hechos ocurran y evitan que se repliquen.”
rafaelcastillopacheco@hotmail.com
http://rafael-castillo-pacheco.blogspot.com/

lunes, 18 de enero de 2010

¿POR QUE CIERTOS TEMAS DE LA SALSA CLASICA GRABADA HACE 30 Y 40 AÑOS, SOLO ES ÉXITO HOY? ANALISIS DE PELUSA, LEY MARTIN, ADLAID STEVENSON, VICTOR B

¿POR QUE CIERTOS TEMAS DE LA SALSA CLASICA GRABADA HACE 30 Y 40 AÑOS, SOLO SON ÉXITO HOY? ANALISIS DE PELUSA, LEY MARTIN, ADLA

Por: RAFAEL CASTILLO PACHECO
No hay ninguna evidencia científica, tampoco estudios de mercadeo que lo sustenten, pero si lo dice Víctor Buelvas, el conocido programador a quien Jairo Paba bautizó como “Terror” tiene que contener ingredientes de realidad. Casi que sugiriendo un axioma de probabilidades, para Buelvas, el milagro de revestir de éxito hoy una gama de temas de la salsa clásica o vieja, después de 30 y 40 años de haber sido grabada, es porque hay un veleidoso incentivo en los programadores de música que a fuerza de repetírselo a los miles de seguidores del genero que se agolpan en los estaderos, logran el embrujo porque son capaces de identificar tanto el gusto como el carácter de las personas. Los Disk jockey se comparan con los astrólogos, porque están habilitados para leer sin incluir los costos de la inflación, lo que dicen las estrellas, de la salsa por supuesto. Las emisoras con solicitudes continuas de los oyentes se ven presionadas a difundir los temas.

Para “Terror” eso tampoco es un salmo a la espontaneidad ni obedece a una irrefrenable pasión descubridora a secas, más bien el acto está precedido de una capitulación sentimental de las imperecederas que tiene los disc-jockey, que luego de conquistar a las damas encebadas por la magistralía de su repertorio, estas al poco tiempo estiman que se les agotó el encanto o que sencillamente ese embeleso no es suficiente para sostener un amorío, dándoles el tiempo de vida de un rosetón al furtivo noviazgo. Florecen entonces las dedicatorias con prosas de desencanto, que hablan del despecho sufrido, como son todas las canciones que logran imponer, siendo su ejemplo vivo - dice Víctor Buelvas- “El Guaguancó del Adiós” , “Sigue Feliz” y “Tartara”. Pero temas como “Cachondea”, “El Tabacón” y “Capitán”, entre varios éxitos, escapan a la teoría de “Terror”
Ley Martín, el fogoso y siempre creativo hombre de la radio del Caribe Colombiano, tiene una percepción distinta. Martín cree que en la hiperbólica producción musical de dos largas décadas estuvieron embutidos los mejores planos de la audición musical del universo, “tanto que no alcanzo a sonar toda en la época”. Se necesitarían días de 48 horas, o que las gentes suprimieran todo tipo de actividad productiva, lo que representaría un costo de oportunidad alto para la sociedad, pues se renunciaría hasta hacer el amor para entregarse a las fauces de esa música. Martin dice –con intenciones de dar alientos a los caza éxitos como el- que el repertorio por descubrir es de una cavidad tal, que falta echar mano de un 50% no programado. Willie Colón, Joey Pastrana, Joe Quijano, Ricardo y Richie, Héctor la Voz, Tony Pabòn , Las Estrellas de Fania y Ruben Blades se escucharan por 7 generaciones , y quien sabe por cuánto tiempo más , si sus herederos no quieren asumir el costo de dejarla penar.
Martin comparte el criterio que los códigos fuentes de esos éxitos están encriptado en las consolas de los estaderos, pero descarta un propósito malévolo o malqueriente en los disc jockey de desarraigar del firmamento la salsa “motel” o la “llorisalsa”. Pero podría haber una especie de rebeldía silenciosa que grita con los temas al descollar en los bailes, que toman como un segundo cuarto de hora con aires de revancha la dupleta de coleccionistas y disc jockey
Jorge Gonzales, un hombre de 54 años, que hace 30 compartía los estudios de bachillerato con un mostrador en Discolombia en la Calle Jesús de Barranquilla, hace una evocación que le atraganta él habla, al verse invadido por los recuerdos. “Salìa a tirar pases”, comenta, como un valor agregado que respaldaba la sugerencia que le hacían al melómano cliente que llegaba buscando exclusividades o tesoros escondidos para seducir a su vecindario. Gozaba de un privativo ojo de halcón para elegir los temas. Gonzales, afirma categóricamente que fue la payola, una especie de paga en dinero constante a los locutores que alteró sus biorritmos y sus gustos, la que tuvo un impacto nocivo en la espiral afanosa de la música salsa. Los locutores dominaban todo la superficie de la programación, con una soberanía que hoy envidian los que solo pueden dar la hora, imponiendo su voluntad a unos oyentes felices que aceptaron revolver sus gustos.
Era de esperarse, que un escritor y periodista de tendencias radicales, como puede definirse a Adlaid Stevenson pusiera la nota discordante, distanciándose de las aseveraciones de sus interlocutores, porque para él lo que ocurrió fue un proceso de detente después que apareciera el alegórico boom de la salsa. “La ciudad abandonó la salsa y se dedicó la conservatismo musical” dice sin estupor. “Ahora muchos diskockeys encuentran esos discos perdidos, de calidad, y los ponen como si fueran de hoy”. Su verticalidad la hace manifiesta cuando le mete toxina al tema, comentando:- En la salsa local hay mucho fundamentalismo e idolatría de discos.- ¿Lo del fundamentalismo es que están casados con ciertos conceptos solamente? le pregunta un interlocutor- No se mueven y se cabrean cuando se les dice otras cosas. Los coleccionistas, por ejemplo- Para ellos la salsa fue lo que se hizo y punto-. Le contrapuntean.-Ellos viven de ese negocio y no les interesa que alguien se los mueva-. Remata
Adlaid entona sus argumentos, planteando, que hay un sinfín de música salsa desenvainándose en el mundo, pero que a Barranquilla no llega “porque esta desconectada del mundo”, fruto de su proceso de detente, de beneplácita petrificación. En eso incidió, dice Stevensòn, la payola coincidiendo en el tema con González, que tuvo en los intérpretes de música Vallenata, sus más dilectos impulsores, agrega.
El último de los invitados es Álvaro Cabarcas Charris, un Barranquillero de Cevillar que saltó de la Escuela Orquesta del INEM a navegar por todo los cielos de Europa y América con el paradigmático Grupo Niche y el inolvidable Tito gomez. Tiene la visión del músico integral, que ejecuta en su piano con destreza esos ritmos, melodías y armonías, con el valor adicional que otorga conocer el mercado por dentro, las entrañas del monstruo. Pelusa, como es más conocido, dice que a “partir de los 90 se jodio la cosa por las disqueras que querían imitar todo lo que se vendía y se crearon un mismo sonido para todos”. Para esos estadios de voluptuosos atributos musicales, cada orquesta tenía un sonido que la distinguía como la Orquesta Capri o Bobby Rodríguez, como en los seres humanos, las huellas dactilares no se repiten, comenta Pelusa. Si las disqueras impusieron sus reglas de mercado, buscando economías de escalas como si se estuviera hablando de productividad sobre acres de tierras, nada podía esperarse de las emisoras consentidas como estaban, con la jugosa payola
El conversatorio concluye con una pregunta para cada uno de los exponentes.¿No te lamentas que temas como Capitán hubieran pasado por tus manos, y tú no los hubieras identificado como éxito? - Le preguntan a Ley Martin._ Cuando salió esa canción en 1.974, yo no estaba en la radio. Habría que hacerle la pregunta Pedro Juan Meléndez. –Respondió cierta ironìa.
“Terror” quien gana con éste reimpulso que ha tenido la salsa clásica? - Es preguntado Víctor.-Los jóvenes, que creen estar bailando música nueva-. Contesta.
Jorge, puedes recordar un tema donde se haya pagado una “payola” cuantiosa? Interrogan a González._ Si, “me Deja el Avión” de Diomedes Díaz.
Adlaid puedes mencionar una agrupación contemporánea que esté produciendo Salsa con calidad? Se le inquiere al escritor.- La Spanish Harlem Orchrestra, que ha tenido a cantantes como Rey de la Paz y Rubén Blades-. Responde sin vacilar.
Pelusa recomiéndate dos temas con la certeza que pueden ser éxito? Interviene el moderador.- “Los Salseros se van” de Willie Rodríguez, y “Todos por Barranquilla”.
Este último de quién es? Es interrogado El pianista- De pelusa y la banda Caramba. Jajaja.
rafaelcastillopacheco@htomail.com

jueves, 7 de enero de 2010

CRONICA DE UNA SUFRIDA TRASMISIÒN POR LA WEB DE UN ESPECTACULO CON HANSEL Y RAUL, DANY DANIEL Y JORGE CELEDON INTERFERIDA POR HACKERS


Por: RAFAEL CASTILLO PACHECO
El espectáculo ampliamente anunciado en medios de comunicación regional con toda la pompa por el Diario El Heraldo, reuniría todos los atractivos para que sus múltiples lectores en el mundo pudieran seguir la trasmisión desde su página web. No pasarían muchas horas, tal vez unas cuatro de iniciado el evento, cuando la zozobra se apoderaría de periodistas y directivos, al ver que las imágenes del evento se volverían pausadas, al ejemplo de cámara lenta, en momento en que Hansel Y Raúl hacían su aparición.
Cuenta Orlando que la dicha cubriría los rostros de todo el equipo técnico, al ver que las visitas a la pagina crecían cada minuto, y justo cuando unas trescientas personas en línea gozaban del frenesí del evento, detonaría el primer mortero disparado desde uno de los rivales del rating, impactando el computador de protección que la productora de Rafael Casadiego, había habilitado para blindar la trasmisión del espectáculo. No recoreria mucho el segundero en su tránsito hacía el minuto, cuando una nueva explosión cibernética teledirigida por otra presunta productora de televisión se hizo sentir. Se inauguraría entonces, un bombardeo sistemático y continuo que no pararía sino a las 8 horas, cuando los canales estarían repitiendo algunos programas emitidos durante el día y mentadas series, según su criterio, de resonante éxito en el pasado. La tentativa de colapsar la web del diario para impedir la trasmisión tendría la reversa de una bala.
Las cadenas de televisión, desde su posición dominante, siguiendo el ejemplo de Netzeek, podrían creerse embebidos de la facultad de determinar el tipo de señal que se pueda producir y emitir, asunto en la que con astuta complicidad sustituyen al Estado. El episodio ayudaría a recordar los 37 años de Creeper, del primer virus que infectó una maquina IBM que reproducía en la pantalla la leyenda “soy una enredadera”, seguida de la expresión “agárrame si pueden”, como en la Guarapera diría del Joe con los Latin.
La experiencia para Orlando, uno de los técnicos de la trasmisión, era realmente nueva, aun considerándose un aventajado conocedor del tema de los hackers. Su disciplinado entrenamiento lo inicia desde la tarde extendiéndolo hasta la madrugada en la red de Internet batiéndose con sus rivales con las reglas previstas en el San Andreas Multiplayer, SAMP, su juego preferido. Traería a cuento, para ilustración de su historia, el enfadoso hecho de un argentino, autoproclamado “Dios” de la red y para sus colegas un virtuoso de la naturaleza que ejercita con postín el inefable arte del “crackeo”. Netzeek, según se llama, con sus ataques DDOS puede destruir los pórtales de juego de sus competidores, como le ocurrió al SAMP, para que solamente los ciberjugadores utilicen los creados por él. La práctica de la más exquisita burdalidad, llega al extremo de mostrar su página, cuando la dirección electrónica que se esta clickeando es de un competidor. Si lograran restablecerlas, no tardaran días en volverlas a tumbar.
A las 8 de la mañana del 17 de Diciembre, más de 15 personas penetrarían a las locaciones del estadio Romelio Martínez para poner a funcionar cuatro cámaras de televisión, dos portátiles y dos computadores grandes. Uno de los computadores jugaría el papel de escudo antimisiles, cumpliendo misiones de protección que tendría en la jornada una utilización prodigiosa.
Ciertamente, los virus crecen en progresión geométrica y sus antídotos en progresión matemática. Aún así, hoy en día es factible establecer en gran porcentaje de casos, de donde provienen los ataques. Todos los computadores como los abonados a internet, tiene una dirección que los identifica, como es la dirección de su casa, y ese código o identificación en lenguaje informático se le denomina IP. Cientos de decenas de IP organizarían sus ataques separados por 30 segundos buscando saturar el sitio web del matutino regional pretendiendo ocultar su verdadero rostro probablemente valiéndose de Sprut, el potente software Ruso, que satura los anchos de bandas. El bombardeo cibernético fue tan intenso que llevaría a la página a un estado de zombi, congelando la imagen por más de cinco minutos. Pudieron utilizar una de las variedades de Socket, comenta Orlando con cierta celebración
Las historias de páginas web tumbadas o intervenidas son abundantes y entretenedoras. Por ejemplo la información de la web del Senado Mexicano fue sustituida por una graciosa fotografía de la Chilindrina, uno de los personajes del Chavo del Ocho. La página de la Comunidad Europea que preside España, fue atacada hace pocos días con el virus XSS colocando una imagen del famoso cómico Ingles Mr. Bean en lugar de una de Zapatero, mofándose el autor de su gran parecido físico. Igual suerte ha corrido la web del Pentágono, de American On Line y la de la guardia civil Española En casi todas hay un ingrediente común – comenta el ingeniero Jerson Herrera-: Son casi siempre jóvenes talentosos, que actúan en el anonimato, que buscan probar las fortalezas de sus desarrollos con fines de diversión, burlando sitios web que se consideran impenetrables. Finalmente unos 12.250 ciberespectadores rotarían durante casi doce horas de trasmisión, lo que resultaría satisfactorio para productores y organizadores. Pero el trasfondo de la narración, adicional a lo contado, no sería un caso paradigmático esa disputa en la red de lo que estaría ocurriendo con el proceso de adjudicación del tercer canal de televisión? No son estos episodios, parte de la intrincada disputa de varios consorcios constituidos en la lucha por el tercer canal? rafaelcastillopacheco@hotmail.com